A pocos kilómetros de Ensenada, en Baja California, te encuentras con el segundo géiser marino más grande del mundo: la Bufadora. Es el atractivo turístico principal de la zona y reúne a miles y miles de turistas cada año. Te voy a contar la historia que oculta en este rincón. Tú ahora solo tienes que decidir si quieres conocerla en vídeo, o si, por el contrario, prefieres leerla en este post.
Si quieres la primera opción, el play lo tienes justo aquí debajo. Para la segunda, ¡sigue deslizando el dedo!
La Bufadora es una maravilla natural que conquista a todo el que pasa por el norte de México. Es una pieza fundamental de la economía de Ensenada pues los turistas la tienen en el número uno de su lista de viaje.
Lo más curioso que te vas a encontrar nada más llegar es la postura que mantiene todo el mundo. Cuando estés bajando los últimos peldaños de las escaleras que desembocan aquí, te parecerá que todos los turistas acaban de ver un monstruo. Pero no.
El selfie con el gran «soplo» de agua que se dispara hasta más de treinta metros, hace que todo el mundo quiera la mejor fotografía. Y aunque hayan visto el géiser en marcha ya varias veces, van a poner cara de sorpresa para la instantánea 😱.
Todo el mundo busca su selfie con la Bufadora de fondo. A ver qué tal sale el tuyo 👀📷
Cuenta la leyenda que un grupo de ballenas iba por el Pacífico y una de ellas se separó del grupo para curiosear por la costa. La mala suerte hizo que se quedara anclada en un rincón de la roca. Y lo que hoy vemos, la espuma grande que dispara la Bufadora, es el agua que sabemos que tiran las ballenas.
Es el segundo géiser marino más grande del planeta y sus olas llegan a superar los treinta metros. Casi nada. Depende del día que te toque, las verás más grandes o más pequeñas. ¡Suerte!
(Por cierto, ¿no hace falta que remarque que la leyenda es una leyenda, no?😂).
Por alrededor de este fenómeno natural se han abierto un montón de puestos: dulces típicos de México, ropa, comida, souvenirs y demás.
¡Mucho ojo con los vendedores de batidos de fruta! Me vieron cara de extranjero (y eso que me dejé el bigote para disimular) y me intentaron colar una piña colada por 15 dólares. Pregunta el precio antes por si acaso y así te evitas una discusión.
Para despedir tu tarde con el mejor color sobre el cielo, te recomiendo una de dos: subir al mirador que hay sobre la misma Bufadora o, si vas con el coche, parar de vuelta a Ensenada en una de las montañas que te encuentras por el camino. Te enseño el resultado de ambas opciones al final de este vídeo.
Cuando vayas, no te olvides de contarme la altura que tenían las olas, a ver si tuviste más o menos suerte que yo. ¡Puedes hacerlo por Instagram, Youtube o por donde mejor te venga!